La ansiedad es mala compañera

. 10 de octubre de 2006
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Estoy tratando de encontrar una foto mía para poner en el blog. Pero no encuentro ninguna que me guste. No entiendo porqué nunca le pedí a Epi que me saque una foto que me agrade. Si ella es fotógrafa y sabe capturar lo que desea en una imágen. Pero claro, me acuerdo de mi foto cuando la necesito, y ahora ella está lejos en el caribe trabajando.

No es que no tenga fotos mías. Es que no me gusto en ninguna.

No es que no me guste yo.

Yo me gusto. Es más, si yo me cruzara conmigo mismo, sería amor a primera vista.

Porque me gusta mi pelo, mis ojos, mi boca, mi piel. Me gusto con todos mis defectos, mi nariz y cuello son casi desproporcionados, pero a mi me parecen encantadores.

Con todo lo que me gusto y no me considero siquiera lindo.

Cómo lo entiendo al pobre Narciso, enamorado de su propia imagen, sólo porque el destino quiso que la flecha de Cupido cayera en un momento errado. Entonces por eso Narciso y yo nos venimos a enamorar de nosotros mismos. Con lo peligroso que puede ser eso.

¿Me consumiré como él mirando mi imagen reflejada en el río? ¿Cómo haré para evitarme? ¿Tendré que mentirme y decirme que no estoy? ¿Cómo hago para terminar una relación de toda una vida?

Aunque, nadie me puede prohibir amarme. ¿Quién se atrevería a hacerlo? Sólo alguien que me quisiera tanto o más que yo podría interponerse entre yo mismo y yo. Pero entonces tendría un problema, estaría forzando a alguien a amarme más que a nada en el mundo. Y eso es imposible. Ya que ni yo mismo me amo tanto.

Amo a mucha gente, que por supuesto no me ama como yo los amo, y yo no los obligo a hacerlo. Amo sin pedir nada a cambio. Amo sin mirar. Amo sin pensar en religión, edad, color o sexo. Amo con sinceridad y honestidad, siempre. Amo sin dobles sentidos. Amo con el corazón y con las entrañas... y creo que por eso no sé amar.

Me amo y amo a los demás. Amo la vida y la muerte. Amo los amaneceres y los crepúsculos. A todos los soles y a todas las lunas.

Y ahora que les dije a todos cuánto me amo, encuentro el verdadero problema de amarme a mi mismo. A pesar de amarme tanto no soy egocéntrico, y no me daría tiempo para estar conmigo mismo. Ese es el problema de este amor imposible. Yo mismo. ¿Y cómo termino esto? ¿Qué me digo? ... ¿El problema no sos yo, soy yo?

Este es el misterio de mi soledad.

10 comentarios:

Cassiopeia dijo...

Si pedis algo a cambio no es amor y si no es sincero y honesto tampoco es amor... pienso que el amor tampoco se puede medir en terminos de "más" o "menos".
Porque alguien quisiera prohibirte amarte? Si eso es lo más importante de todo! Por algo siempre dicen (los que saben)"para poder amar a alguien tenes que amarte a vos mismo".
Me parece que el amor propio no tiene nada que ver con el egoismo ni la egocentricidad, sino con que uno se acepta y se quiere como es, ya séa con una nariz desproporcionada...
Y a pesar de que uno se ame, hay dias que dudás, días en los que sólo encontras las fallas, como en cualquier relación... Supongo que es normal...
Creo que lo que mejor sería poder amarnos a nosotros mismos sin tener que buscar confirmación en los demás... si descubris como hacerlo: avisá!

"no soy yo, soy yo"

Kaitos dijo...

No sabés lo bien que me vino leer tu comentario.

Cuando decía que amo sin pedir nada a cambio y etc, me refiero que cumplo con esos requisitos (no sé si implícitos) del amar.

Igualmente capaz que me refería a algo un poco más literal, aunque no estoy seguro... tendría que haber aclarado que lo escribí mientras estudiaba Conservación y Manejo de Suelos... Si mañana en en medio del final me largo a hablar de lo mucho que me atraigo... me muero.

Desdichada dijo...

me gusta como una idea se ata a la otra. los miércoles siempre son claves

absurda y efímera dijo...

absurda, un poco. efímera, no me sale. gracias por pasar. y que lo sepa: su blog se lee y se disfruta mucho

Griselda García dijo...

usté es un tierno, querido.

Anónimo dijo...

Cómo no te vas a amar??? Si yo fuera como vos, también me amaría!!!!

Y arriba con esos parciales carajo!!!!

Juan Martin Zubiri dijo...

Es un problema amarse a uno mismo. Una vez me pasó que hice una cita conmigo y no fui.
Me dejé plantado en un bar de Palermo.
Fue devastador!

Yo solo, esperándome... con mis mejores ropas, hasta me había comprado un regalo!

Desde ese día, me di cuenta que soy una mierda de persona y no me hablo más...

Si me ves, decime que me extraño!

absurda y efímera dijo...

¿¿¿¿¿Cómo te fue en el parcial????

Anónimo dijo...

No se si soy yo interno el que escribe o soy yo externo.. creo que tenemos 2 o mas yoS, y que en el amar esas otras, naturales, partes de nosotros nos haga poder ser conformes con nosotros mismos. Creo que Kaitos se ama, porque COMO HACES PARA NO AMAR A KAITOS (yo soy machito, pero che, una persona asi se ama y basta... sacando los terminos sexuales y perversos de la palabra AMAR).
Uno que se quema la jeta y ve todavia el lado bueno, uno al que el mundo se divierte a tirarle cosas encima, y tiene la fuerza para darte una palmada en la espalda cuando crees que tus problemas son jodidos...
Quien lo conoce bien, lo ama.. es inebitable!!

VAMOS KAITOS CARAJO..
PD: no me puedo firmar xq no tengo ganas de inscribirme al Blog, pero "tu sai chi sono io".. =P

Unknown dijo...

A mí me pasó a algo parecido a lo que describe Martu: aunque al principio mi romance conmigo mismo fue muy bien, el sexo era un problema, sobre todo el oral. Y es como dicen nomás: lo que no se tiene en casa, se busca afuera; y fue así que un día llegué más temprano a casa, y me descubrí engañándome con alguien que no era yo. Eso me partió él corazón. Justo yo, que me había consagrado a mí mismo los mejores años de mi vida, que siempre me había dado todos los gustos... pero es muy difícil sorprenderse. Igual tengo que confesarte algo: hoy en día, uno no puede confiar en nadie. Ni siquiera en uno mismo.