Poco mas de un mes de sufrimientos se escaparon en un espástico movimiento. La luz de sus ojos se escapó, para nunca mas volver.
Aunque el humor se llenó de agudos gritos aturdidores, no hubo palabra alguna que pudiera comunicarnos lo que realmente pensabas. No hubo siquiera un atisbo de comunicación, simplemente una huída estruendosa.
Los intentos por alcanzarte y retenerte, ahora que te habíamos dejado ir, no se hicieron esperar. Las lágrimas y el arrepentimiento aparecieron antes que la sombra escapara de su lecho. Pero fueron vanas. Inútiles.
Sólo resta confiar en la nueva vida. En el nuevo amanecer.
2 comentarios:
Creo que solo cabe decir que el año recién empieza y lo mejor está aún por pasar. Arriba el ánimo y el optimismo. Comer chocolate ayuda, lo sé, me bajé unos cuantos en las últimas semanas. Si además tenés la posibilidad de llorar y dormir mucho, parece que un día te levantás y ya está...no sé eso a mí todavía no me pasó.
Mariana, supongo que es así como las heridas se curan. En este caso, son las palabras que se me escurrieron por la retina, junto con las lágrimas de alguien que quiero mucho.
··· En la vida, no queremos sufrir, queremos tocar el cielo ···
Besos
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